Quito pasa por el peor momento de la pandemia y la ciudadanía no colabora para controlarla. La situación obliga a las autoidades a pedir un nuevo Estado de Excepción para imponer restricciones.
Desde hace meses Quito es la ciudad más golpeada por la pandemia. Según los datos oficiales, hasta este lunes en la capital se registron 96.431 casos de Covid19 mientras que Guayaquil, por ejemplo, reportó 25.779 contagios. Así Quito concentra el 31,8% de los casos de todo el país.
Las autoridades alertan que la situación está desbordada y una de las razones es la falta de colaboración de la ciudadanía como se demostró el fin el semana.
Santiago Guarderas, Vicealcalde de Quito dijo “yo puedo llamar a este como el fin de semana negro. Como puede creer usted que haya más de 8.500 libadores, 290 fiestas clandestinas, una de ellas en Santa Rita con más de 500 personas. Las cifras son escaliofriantes. En Quito el 5,77% de contagios entre niños y jóvenes de hasta 19 años.
Por eso, los hospitales ya no abastecen las necesidades. Las unidades de cuidados intensivos están llenas actualmente, 23 pacientes están en una lista de espera para conseguir una cama en hospitalización de todas las casas de salud, según el vicealcalde.
Ante la situación el cabildo pidió a la corte constitucional que permita dictar el Estado de Excepción en la capital para controlar los contagios.
Guarderas, concluye que nos enfrentamos a dos eventos hoy empieza la segunda vuelta esperemos que no haya aglomeraciones como la vez pasada y luego tenemos la semana santa, que va a ocurrir, están desbordados los hospitakles las UCIs y por consiguiente esta situación puede ser mortal y devastadora.
Los médicos aseguran que la situación se produjo porque las autoridades no escucharon sus advertencias sobre los feriados y la campaña electoral. Por eso, ahora están de acuerdo con que se tomen nuevas medidas de restricción. Mientras el municipio mantiene los controles también exige al gobierno que abra la importación de vacunas a los cabildos y a la empresa privada.